Es difícil imaginar que el hormigón se escurra como el agua, pero no imposible. Una de las varias propiedades que tiene el hormigón autocompactante es que permite llenar encofrados, sin necesidad de vibradores, mediante el agregado de aditivos especiales, este tipo de hormigón requiere dosificación de sus componentes. En relación con otros tipos de hormigón, los autocompactantes poseen un mayor contenido de componentes finos(grava con menos de 125 mm). “Creo que el hormigonado sin esfuerzo va a cambiar la historia. Si bien los costos por metro cúbico pueden ser mayores, la elevada productividad y velocidad de construcción llevan a un menor costo final de la obra terminada y menor tiempo para la habilitación de la misma”, comenta el ingeniero Oscar Miura, director del Laboratorio de Hormigón de la UNPSJB.
Por su comportamiento como líquido elimina las posibilidades de macro vacíos o burbujas de aire durante el colado, aliviana hasta un 30% la presión de bombeo, fluye en los encofrados superando obstáculos y se autocompacta por acción de su propio peso.
Esta nueva tecnología se utilizó por primera vez en Japón, como solución a la problemática sísmica y es la misma que se empleó para construir el nuevo edificio de YPF en Comodoro Rivadavia, siendo el primero que utiliza esta técnica en el interior del país. Para llevar a cabo ese proyecto durante un mes se realizaron pruebas de laboratorio bajo la supervisión del ingeniero Leonardo Checmarew, jefe del Servicio Técnico de Sika y del mismo Oscar Miura.
Luego de estudiar los materiales componentes se realizó la dosificación consistente en: cemento, aditivo hiperfluidificante (sika viscocrete-6), reduciendo la cantidad de agua en la mezcla. Los ensayos de laboratorio determinaron una resistencia de 54 Mpa (540 Kg/cm2 ) para el hormigón autocompactante a la edad de 7 días.
Otros ensayos realizados en el laboratorio de hormigón de la Universidad determinaron una resistencia de 64 Mpa (640 Kg/cm2 ) a la edad de 28 días para la estructura de hormigón del edificio de YPF, que lo ubica en una resistencia similar al obtenido por las Torres Petronas de Malasia.
Esta nueva técnica posibilita contar con un material de elevado desempeño, ya que eleva la productividad en el transporte, colocación y compactación del hormigón en obra, además de tener una excelente terminación superficial y total perfección en copiar fielmente los cantos vivos y características del encofrado. Además, contar con un material de mayor resistencia y durabilidad posibilita dimensionar una estructura con secciones de menor escuadra, y por lo tanto con menor volumen total de hormigón. Ello redunda en una menor utilización de la cantidad de recursos no renovables, salvaguardando el medio ambiente.