Muchas madres deben dejar de amamantar a sus bebés por distintas razones.
El proyecto Lactancia Materna en Argentina, de la Universidad Nacional de La Plata, aborda la influencia de factores culturales, económicos, educativos y sanitarios en la evolución de los neonatos durante sus primeros años de vida. La investigación es dirigida por la doctora Nora Mestorino y el doctor Gustavo Marín, ambos docentes de la cátedra de Farmacología Básica de la Facultad de Medicina de la UNLP.
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Para Mestorino, hay dos grandes factores que determinan el desarrollo normal de los niños: la calidad de la leche materna y el amamantamiento exclusivo durante los primeros seis meses de vida. Los investigadores recolectaron cerca de 4 mil muestras de leche de madres que asisten a las diferentes salas sanitarias de la región, con el fin de analizar la calidad de la leche. Además, tomaron muestras en el Servicio de Donación del Policlínico San Martín de la ciudad de La Plata. Los ensayos bioquímicos realizados sobre las muestras permitirán contar con un diagnóstico certero acerca de sus características nutricionales.
Mestorino explicó a InfoUniversidades que “aquellas madres que provienen de los sectores más vulnerables de la población sufren déficit nutricionales importantes derivados de su escasa o mala alimentación; esto tiene consecuencias directas sobre la calidad de la leche y, como consecuencia, sobre el desarrollo psico motriz del lactante”.
Uno de los objetivos fundamentales del proyecto es lograr detectar estos casos de déficit nutricional para luego, sobre la base de un diagnóstico certero, diseñar planes de alimentación que permitan mejorar el perfil nutricional de las madres. “El análisis científico de la realidad nos va a permitir planificar con rigurosidad un esquema de nutrición superador, que luego podría incorporarse a las diferentes políticas de asistencia social que llevan adelante los organismos oficiales de gobierno”.
La leche materna, irremplazable
La investigación también centra la mirada en la promoción de la lactancia materna como alimento exclusivo en los primeros seis meses de vida de los niños. Sin embargo, los investigadores señalaron que son muchas las madres que no cumplen con esta recomendación.
La especialista de la UNLP detalló que las mamás dejan de amamantar pronto por diferentes razones: por la vuelta al trabajo, por desconocimiento, e incluso por cuestiones estéticas o de moda. “Las madres tienen que saber que hay elementos que son sustanciales para el desarrollo normal de los chicos y que sólo están presentes en la leche materna” enfatizó Mestorino. Incluso agregó que “ni siquiera las leches maternizadas de las mejores marcas pueden garantizar un desarrollo saludable porque no poseen los anticuerpos que sí tiene la leche materna para fortalecer el sistema inmunológico del bebé”.
En la zona del Gran La Plata hay alrededor de unos 12 mil nacimientos por año. Si se garantiza una correcta alimentación para los recién nacidos, se está haciendo una inversión de cara al futuro. “Un bebé bien alimentado va a tener muchísimas menos posibilidades de desarrollar enfermedades respiratorias, problemas motrices, anemia; incluso está probado que la calidad de la lactancia puede llegar a incidir en el desempeño intelectual de los niños”.
La docente de la Facultad de Ciencias Médicas advirtió que aún no hay políticas de Estado sólidas que fomenten la lactancia materna. Por ello, el proyecto también incluye charlas y talleres de información y concientización con madres y embarazadas que se desarrollan en diferentes centros municipales de la región.
El aporte de la UNLP
Casi un centenar de trabajadoras no docentes de la casa de estudios platense ya se benefician con el régimen de licencia extraordinario por maternidad dispuesto por la presidencia de esa casa de estudios, en conjunto con el gremio que nuclea a los trabajadores.
La UNLP se transforma así en la primera institución del país en efectivizar esta medida que extiende la licencia por maternidad treinta días antes de la fecha probable de parto hasta seis meses a contar desde el día del nacimiento del hijo, que permite a las madres amamantar y cuidar a su bebé en el seno del hogar durante los primeros 6 meses de vida. “La leche materna contiene todo lo que el niño necesita durante este período de vida y no es necesario agregar ningún otro alimento”, remarcó Adolfo Brook, director de Salud de la Universidad platense. Y agregó: “Es el mejor alimento que una madre puede ofrecer, no sólo por su composición, sino también por el vínculo afectivo que se establece entre la madre que amamanta y el bebé que es amamantado”.
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“La leche materna protege al niño frente a muchas enfermedades tales como catarro, bronqueolitis, neumonía, diarreas, otitis, meningitis, infecciones urinarias, enterocolitis necrotizante o síndrome de muerte súbita del lactante pero, además, lo resguarda de enfermedades futuras: asmas, alergia, obesidad, enfermedades inmunitarias como la diabetes, la enfermedad de Crohn o colitis ulcerosas y arterioesclerosis o infarto de miocardio. Además favorece el desarrollo intelectual”, cerró Brook.