Analizar la formación pedagógica en docentes de educación superior, puntualmente a partir de las experiencias de profesionales que se han especializado en docencia universitaria, es el objetivo de un equipo de investigación en el ámbito del Instituto de Ciencias Educación (ICE) de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL).

> Leer también: Casa de Trejo invertirá $1,3 millones por año para que sus docentes finalicen maestrías y doctorados.

Para ello, tomaron como estudio de caso la Especialización en Docencia Universitaria (EDU) de FFyL, una carrera de posgrado que se sostiene desde hace 26 años en la UNCUYO. “La formación docente no siempre lleva a configurar una mirada pedagógica innovadora en quien se está formando. Cada colega trae consigo desde su biografía escolar una construcción sobre la enseñanza y el aprendizaje que va moldeando implícitamente su accionar presente como docente. Esto nos lleva a mirar qué pasa y cómo es esa formación pedagógica”, explicó a Argentina Investiga la doctora en Educación, Lorena Cruz, directora del proyecto.

En términos de resultados, el equipo logró concluir que los docentes construyen un posicionamiento pedagógico, un saber ser pedagógico, un conocimiento pedagógico teórico, un conocimiento pedagógico implícito, y un saber pedagógico práctico, a través de un proceso de reflexión de la experiencia que incluye lecturas e intercambios con colegas de otras áreas de conocimiento; es decir, a través de un proceso en el que se asumen como protagonistas de dicha construcción. También se determinó que el conocimiento que construyen es subjetivo y se entrelaza con lo colectivo, que está situado en un contexto socio-cultural, histórico y político, y que es portador de un fuerte componente emocional; en definitiva, que se trata de una construcción experiencial, reflexiva y analítica.

“Poner la mirada para comprender, desde la particularidad y en profundidad, el entretejido de la formación pedagógica en docentes especialistas en distintas áreas de conocimiento, nos permite asumir a la docencia y a su formación desde el compromiso y la responsabilidad que hoy nos demanda un contexto complejo de grandes cambios -aseguró Cruz y añadió-; estos resultados no sólo enriquecen esta formación de posgrado sino que permiten extender a otro tipo de formación pedagógica inicial y continua, en donde la formación pedagógica se constituya como decisiva y poderosa”.

Más detalles de la investigación

Para darle un contexto a las conclusiones alcanzadas, cabe recordar que la Especialización en Docencia Universitaria (EDU) es una propuesta de formación a distancia en la que el docente va desarrollando distintas prácticas de aprendizaje que luego se reconfiguran en el “texto paralelo”, un escrito de autoría propia que recoge el proceso de aprendizaje del colega en formación.

En relación a esta escritura formativa, al equipo de investigación le interesó analizar si se construye conocimiento pedagógico, cómo se construye y qué características tiene ese conocimiento. “La relación entre lo pedagógico y lo disciplinar se va entrelazando. En un primer momento, como supuesto, al iniciar la investigación puede creerse que ese conocimiento disciplinar tiene más peso que el pedagógico, pero hemos ido analizando y viendo que en la construcción de la escritura en textos paralelos esa tensión no aparece tan fuerte, sino que se va entrelazando”, sostuvo Cruz, quien también es profesora en FFyL.

Cabe señalar que usaron un enfoque hermenéutico interpretativo y que se valieron de un muestreo intencional que les permitió construir criterios valiosos para la investigación. “Mirar el contexto natural donde se configuran estos escritos es fundamental para comprender en profundidad qué y cómo construyen. Es por eso que primero nos detuvimos en el contexto de creación y desarrollo de la Especialización y, luego, hicimos un análisis cualitativo fuertemente inductivo de los textos paralelos de construcción y reconstrucción de categorías y meta-categorías- precisó la investigadora. Luego agregó: “Hemos iniciado y avanzado en este proceso de análisis, y aún quedan otros niveles de análisis que nos permitirán comprender mejor el entretejido de construcciones pedagógicas que hacen los colegas docentes en el marco de esta Especialización”.

El proyecto se llama “La construcción del conocimiento pedagógico en el marco de una formación de posgrado. La escritura en los textos paralelos”. Fue financiado por la Secretaría de Investigación, Internacionales y Posgrado (SIIP) de la UNCUYO. La co-directora es Elena Margarita Barroso, y completan el equipo asesores/as pedagógicos de la Especialización, y las y los egresados Loana Lombardozzi, Vanina Lucero, Darío Navarra, Romina Marianetti, Mariela Ruarte, Claudia Espinoza y Cristian Sánchez.

Casi tres décadas formando en pedagogía universitaria

Con el propósito de transformar los procesos de enseñanza y aprendizaje, la UNCUYO creó en 1995 un servicio pensado para sus propios educadores: la Especialización en Docencia Universitaria. Hacia finales de 1998, esta carrera de posgrado se abrió a docentes de otros establecimientos de educación superior, llegando a contar en la actualidad con más de 25 años de experiencia en pedagogía universitaria y en educación a distancia, modalidad con la que nació y desarrolló desde un principio.

Vale subrayar que su sostenida trayectoria se basa, por un lado, en la concepción pedagógica y la organización del sistema y, por otro, en la dedicación y el compromiso de los educadores con el mejoramiento de la calidad de la enseñanza y del aprendizaje en la educación superior.

Está acreditada por CONEAU y destinada a docentes de nivel superior que están en ejercicio de su profesión y que pertenecen a distintas áreas de conocimiento, con distintas experiencias y trayectorias en la docencia. Su precursor es el pedagogo, y referente en educación y comunicación Daniel Prieto Castillo, quien también fue el primer director de esta carrera que FFyL dicta de forma virtual.

Se dirige directamente a la práctica, con un bagaje científico y con una propuesta de mediación orientada a la revisión de formas de enseñar y de relacionarse con los estudiantes. A su vez, cuenta con un equipo de asesores pedagógicos con amplia y probada experiencia en la tarea de promover y acompañar el aprendizaje de los participantes.

> Leer también: La Universidad frente al espejo.

Tiene una duración de dos años y está compuesta por cuatro módulos (de cada uno resulta un escrito): la enseñanza en la Universidad, el aprendizaje en la Universidad, la Educación Superior y la pedagogía universitaria.